La semana pasada la blogósfera estuvo escandalizada por un proyecto de ley en España que favorecía los intereses de la industria cultural (propiedad intelectual, etc), contradecía la divisón republicana de los poderes y limitaba los llamados «derechos de internet». La presentación del manifiesto causó bastante revuelo y discusiones que, aunque aún no se resolvieron, consiguieron que el presidente de España emita una declaración asegurando que ningún sitio sería cerrado sin proceso judicial.
Una muestra de que la gente organizándose mediante los blogs puede lograr defenderse (aunque no organizarse del todo).

Además en España existe hace poco el Partido de Internet, una movida que en principio suena interesante, una idea con la que yo también había coqueteado en algún momento. El entusiasmo con esta idea se me diluyó un poco ahora.

Me pregunto por qué internet necesita derechos y partidos propios ¿No es una división arbitraria y excluyente?